#diariodeunmentor La lección de Ulises que deberías aplicar YA si no quieres que tu empresa se hunda contigo

por | 18 Sep, 2025 | Uncategorized

¿Quieres saber cuál es el mayor enemigo de tu negocio?

No es la competencia.

No es el algoritmo.

No es la inflación.

No son los leads que no convierten.

Ni siquiera los clientes que te piden descuentos y pagan tarde.

El enemigo eres tú.

Tu cerebro.

Tus excusas.

Tu falta de sistema.

Y si no lo entiendes ya, ahora mismo, te vas a cargar tu propio barco.


¿Y sabes qué es lo peor?

Que no hace falta que seas tonto para sabotearte.

Solo hace falta que seas humano.

Que te disperses.

Que procrastines.

Que te convenzas de que “esta vez sí”.

Y termines haciendo lo de siempre: nada.

Por eso, en lugar de motivarte con otro post de alguien que ni conoces, hoy te traigo algo más útil:

Una cuerda.

Un mástil.

Y una historia que lleva 3.000 años dándonos una lección que tú sigues ignorando.


Ulises no era un flipado de la motivación.

Era estratega.

Sabía que si escuchaba el canto de las sirenas… estaba jodido.

Que no importa cuánto se preparase,

o cuánta autoestima tuviera ese día…

El sistema de las sirenas era más fuerte que su voluntad.

¿Y qué hizo?

Se ató.

Literalmente.

Se ató al mástil de su barco.

Y mandó poner cera en los oídos de su equipo.

Así, cuando empezó a gritar como un loco “¡soltadme!”,

nadie le hizo caso.

El barco siguió su rumbo.

Y Ulises vivió para contarlo.


¿Sabes cómo se llama eso en mi sistema Mamuts vs Halcones?

Estrategia Ulises.

Y sí, es una de las 90 armas del libro.

No es una metáfora mitológica.

Es una herramienta real que aplico en mentorías, asesorías y en mis propios negocios.

Una que funciona siempre.

Porque está basada en una verdad incómoda:

No eres débil.

Pero si te enfrentas tú solo a tu mamut… vas a perder.


Los 300 mamuts que aparecen en el libro no son inventos.

Son reflejos de la vida real.

– “Lanzaré cuando esté todo perfecto.”

– “No subo el precio, a ver si espanto al cliente.”

– “Reviso el logo otra vez, no me convence.”

– “Estoy casi, casi… pero me falta un curso más.”

– “No delego porque aún no tengo el equipo ideal.”

– “Estoy esperando a que baje el estrés.”

Mitos. Excusas. Autoengaños.

Todos tienen forma de mamut.

Y todos se repiten.

No porque seas tonto.

Sino porque no has diseñado un sistema para protegerte de ti mismo.


Así es como se aplica la Estrategia Ulises en negocios reales:

1. Detectas tu sirena

No es lo que te debilita.

Es lo que te seduce.

Es eso que te dice al oído:

“Mejor mañana.”

“Ya lo harás cuando estés listo.”

“Espera a que sea perfecto.”

“¿Y si esta vez sale mal?”

Identifícala.


2. Diseñas el mástil

Es lo que no te deja escapar.

– Fecha pública.

– Compromiso con clientes.

– Contenido anunciado.

– Oferta en la calle.

– Alguien esperándote con una factura si no cumples.

No es voluntad.

Es sistema.


3. Pones cera en los oídos del equipo

¿A qué me refiero?

A que dejes de rodearte de gente que te escucha con pena.

De amigos que te entienden demasiado.

De socios que no te exigen nada.

De coaches que te validan la parálisis con voz suave.

Necesitas halcones.

Gente que te diga “te has atado, no te voy a soltar.”

Gente que no compre tus excusas ni aunque llores.

Gente que no te deje huir del compromiso que tú mismo pediste.


4. Sustituyes la debilidad por halcones

– ¿No vendes? Halcón closer.

– ¿No delegas? Halcón integrador.

– ¿Te dispersas? Halcón project manager con látigo.

– ¿No lanzas? Halcón con calendario, cámara y botón de publicar.

No hace falta que seas bueno en todo.

Hace falta que no seas tan ingenuo como para pensar que vas a poder solo.


Esto no va de motivación.

Va de arquitectura emocional y estratégica.

No vas a cambiar tu esencia.

Pero puedes diseñar un entorno donde esa esencia no lo arruine todo.


¿La buena noticia?

Que puedes empezar ahora.

Detecta tu punto débil.

Atate.

Tápate los oídos.

Rodéate de halcones.

Y deja de comportarte como si fueras Ulises sin cuerda.

Porque no lo eres.

Y si no lo entiendes ya, lo entenderás cuando la próxima sirena te vuelva a convencer…

de que mañana será distinto.

La estrategia Ulises está en el libro. (queda poco para que salga)

Es una de las 90 armas.

Y probablemente, una de las más jodidamente necesarias.

Y si no te gusta atarte…

prepárate para estrellarte.

La elección es tuya.

Comparte esta entrada en:

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Verified by ExactMetrics