#diariodeunmentor Los 3 pasitos para convertir a desconocidos en amigos, amigos en clientes y clientes tus comerciales.

En el último encuentro del Business Social Club, Manu, siempre directo, cuando nos íbamos para casa me lanzó una pregunta:
—¿Cómo haces para que tus negocios crezcan sin estar todo el día persiguiendo clientes?

Le miré, me crucé de brazos y respondí con una sonrisa:
—No los persigo, Manu. Los atraigo, los cuido y ellos hacen el resto.

Manu arqueó una ceja, esperando que me explicara mejor. Entonces cité a Seth Godin:
“Convierte a los extraños en amigos, a los amigos en clientes y a los clientes en vendedores.”

Lo vi apuntar la frase en su móvil. Pero, claro, las frases bonitas no son suficientes. Así que me senté a desglosar el poderoso consejo que contenía esta frase del gran Seth.

1. De extraño a amigo: conecta antes de vender

—Manu, si intentas venderle algo a alguien que no te conoce, es como pedirle matrimonio en la primera cita. Ridículo, ¿verdad?

Le expliqué que la clave está en generar confianza antes de intentar vender.

• Comparte contenido útil que resuelva problemas o inspire. Algo tan bueno que piensen: «Si esto es gratis, lo de pago debe ser increíble.»
• Muestra que entiendes sus necesidades y que tienes una solución específica para ellos.

Manu asintió, y a continuación pregunto:
—¿Y si no tengo tiempo para crear contenido o conectar con todo el mundo?
—Si no tienes tiempo para conectar, Manu, no tendrás clientes que confíen en ti.

2. De amigo a cliente: haz que comprarte sea fácil

Cuando alguien ya confía en ti, vender no debería ser un esfuerzo. La venta debería fluir.

• Facilita el proceso: Nada de complicarles la vida con formularios eternos o explicaciones técnicas.
• Habla de beneficios: No les cuentes cómo funciona tu producto, cuéntales cómo les va a cambiar la vida.
• Haz que la experiencia de compra sea memorable. Si un cliente siente que elegirte fue la mejor decisión, volverá.

Manu anotaba como un loco.
—¿Y si me dicen que es caro?
—Si sienten que es caro, Manu, es porque no has mostrado suficiente valor. Cuando alguien entiende lo que ganas con un producto o servicio, el precio pasa a segundo plano.

3. De cliente a vendedor: el círculo perfecto

Aquí está el verdadero secreto: convertir a tus clientes en tus mejores comerciales.

• Sorpréndelos: Da más de lo que prometiste. Un pequeño detalle inesperado puede marcar la diferencia.
• Haz que quieran compartir: La gente adora recomendar cosas que les hacen quedar bien. Dales esa oportunidad.
• Pídelo: Un simple «¿Podrías recomendarnos si te ha encantado?» abre puertas que ni te imaginas.

Lo que pasa cuando lo aplicas

Terminé diciéndole a Manu:
—Mira, los negocios que crecen de verdad no dependen de cazar clientes uno a uno. Dependen de que esos clientes traigan a otros.

Le conté historias de empresarios que mentorizo:

• El que dejó de gastar un dineral en anuncios y empezó a generar recomendaciones.
• El que hizo de cada cliente su embajador.
• Y el que, gracias a conectar, vender y sorprender, convirtió un negocio pequeño en un imán de oportunidades.

El consejo que dejé sobre la mesa

—Manu, hazte estas tres preguntas hoy mismo:

1. ¿Estoy conectando con mis extraños o solo estoy persiguiendo ventas?
2. ¿Estoy facilitando la compra o complicándola innecesariamente?
3. ¿Estoy haciendo que mis clientes quieran hablar de mí o solo espero que lo hagan?

Porque el sueño de todo negocio es que tus clientes trabajen para ti. Y si no lo estás consiguiendo, algo estás haciendo mal.

Los billetes no están en perseguir, están en construir relaciones que hagan que otros vendan por ti. 💸