No lo podrás hacer, porque nunca me rindo, y tendrás que ganar mil batallas antes de que me veas tirar la toalla.
No puedes vencerme, repito de nuevo, porque me he enfrentado más veces al fracaso que cualquier persona promedio, he sufrido tantas derrotas que he endurecido la piel y gracias a todo lo que he pasado he perfeccionado mi instinto de supervivencia.
Te enfrentas a alguien que ha dado un nuevo sentido a la palabra miedo, y que ha evolucionado la palabra inconformista hacia una nueva dimensión.
No puedes vencerme y no te aconsejo que lo intentes, porque trabajo más que nadie, nunca me doy por vencido y soy un enfermo obsesionado por mejorar día a día, reto a reto, sin dejar de mirar a los ojos a las adversidades que me enfrenta la vida.
No quiero que pienses que es egolatría ni soberbia, simplemente debes saber a la hora de enfrentarte a mi, no me podrás vencer porque ya lo he perdido todo muchas veces, que ya no tengo miedo a volver a empezar de nuevo, porque volveré a apostarlo todo hasta que termine ganando o muriendo en el intento.