Muy buenos días ZASCAS!!!
De repente todo se vuelve tan simple que asusta. Perdemos ciertas necesidades que ya no sentimos importantes, se reduce el equipaje, en el momento que descubrimos eso es cuando llega la satisfacción plena, tan sencillo como tocar el agua, como acariciar una mascota, como una manta sobre nuestro cuerpo desnudo.
Nos liberamos de las opiniones de los demás, incluso si son sobre nosotros; ya no importa. Abandonamos las certezas porque ya no estamos seguros de nada, pero tampoco nos hace falta estarlo, empezamos a vivir de acuerdo con lo que sentimos, dejamos de juzgar, porque ya no hay bien o mal, sino más bien la vida que hemos elegido cada uno.
Finalmente entendemos que todo lo que importa es tener paz y tranquilidad, es vivir sin miedo, es hacer lo que alegra el corazón en este preciso y precioso momento.