Muy buenos días ZASCA

Un día me di cuenta que a mayor esfuerzo realizaba mayor era la recompensa que tenía, que a mayor control de las variables y las probabilidades más “suerte” tenía, que si dedicaba muchas horas a estudiar más conocimiento adquiría y mejor me iban los negocios, las empresas y los proyectos.

Un día me di cuenta que debía conocerme mejor, que si tenía pensamientos limitantes tenía resultados limitados, que no podía juzgar a nadie porque no soy juez, que tengo todo el derecho del mundo a equivocarme las veces que sean necesarias y no sentirme mal por hacerlo, que una hoja en blanco era una nueva oportunidad de crear, que no hay que llenar la vida de días sino llenar de vida cada uno de los días, que la música, un buen libro, una película podían cambiar mi estado de animo y elevar mi espíritu.

Hace mucho tiempo me di cuenta que cuanto más me costaba lograr algo más valor le daba a lo logrado, la experiencia me demostró que cuanto más fracasos tenía más cerca estaba de conseguir mis éxitos, que los errores son los mejores maestros, que si lo tengo todo controlado es que no estoy arriesgando suficiente y si no arriesgo lo suficiente me estanco y no evoluciono.

Un día me di cuenta, que cuanto más amor daba más recibía, aprendí que los “te quiero” que no se dicen son difícilmente recuperables, entendí desde muy pequeño que prefería llorar yo a que otros lloraran por mi, me di cuenta de que no hay espacio que controle mejor que lo que abarcan mis brazos, que soy mejor cuando estoy enamorado y que aunque mi corazón este lleno de retales y malas costuras todavía me pide a gritos que siga enamorándome.

De un tiempo a esta parte me he dado cuenta que siendo hormiga llego más lejos que imitando a la cigarra, que no podía comprar mis necesidades a través de falsos generadores de felicidad transitoria (ropa, coche, marcas), que soy mucho más que todo eso, que la mejor inversión que puedo hacer es invertir en mi.

Un día me di cuenta que el ser humano tiene un potencial increíble, que ayudar a los demás a lograr sus sueños era una de mis misiones en la vida, que hacer reír a alguien marcaba una huella imborrable en su alma, que cuanto más doy recibo mucho más a cambio, que hacer ver a los demás de sus fortalezas y minimizar sus debilidades lograba hacer felices a las personas.

Ahora que empiezo a hacerme mayor, me he dado cuenta que mi DNI nunca podrá definir mi edad ni de donde soy, que no soy catalán, ni español, ni europeo, soy un ciudadano del mundo, que mi imaginación puede volar donde yo quiera y estar donde me apetezca, que soy el máximo responsable de mi felicidad y que la llave de mi alegría no la doy a nadie (en todo caso la presto), me di cuenta también que ser sensible y llorar no me hace ser menos hombre.

Un día me di cuenta que mi autodisciplina era mi mayor libertad, que lo que marcaba la diferencia era disfrutar del proceso en vez de centrarme en el resultado, que siempre hay un sueño que perseguir, una persona que necesita ayuda y una meta que hay que conseguir, que a las personas que tenemos alrededor hay que darles calor cada día, que no debía confundir lo que era importante de todo lo que parece urgente.

Hoy me he dado cuenta que si me leéis es porque a vuestra manera también os dais cuenta….

y el ZASCAS de hoy

¿y tú de qué te has dado cuenta?

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